Cremación



  La cremación es la práctica de deshacer un cuerpo humano, quemándolo, lo que frecuentemente tiene lugar en un sitio denominado Crematorium o Crematorio. Junto con el entierro, la cremación es una alternativa cada vez más popular para la disposición final de un cadáver.

Tabla de contenidos

Historia

Antigüedad

La primera cremación apareció en El Levante en el Neolítico, pero declinó durante el establecimiento de la cultura semita en esa área cerca del tercer milenio. La cremación fue ampliamente observada como una práctica bárbara en el Antiguo Oriente Próximo, que se usaba solamente por necesidad en tiempos de plagas. Los Babilonios, de acuerdo a Heródoto, embalsamaban sus muertos y los Persas Zoroastras castigaban con la pena capital a todo aquel que intentaba la cremación, con una especial regulación para la purificación del fuego profano.

En Europa, hay huellas de cremaciones que datan de los Principios de la Edad del Bronce (2000 años antes de Cristo) en la Llanura panónica y a lo largo del medio del Danubio. La costumbre vino a ser dominante a través de la Edad del Bronce con la Cultura de los Campos de Urnas(Del 1300 antes de Cristo). En la Edad del Hierro, la inhumación vino a ser nuevamente más común, pero la cremación persistió en la Cultura de Villanova y en otros lugares. Homero acota sobre los funerales de Patroclo, describiendo su cremación y su posterior inhumación en un Túmulo similar a los de la Cultura de los Campos de Urnas, siendo calificada como la más temprana descripción de los ritos de cremación. Las primeras cremaciones pudieron haber estado conectadas a las ideas de inmolación con fuego, tal como Taranis, dios del Paganismo Céltico (ver Sacrificio humano).  

El Hinduismo es notable por no solo permitirla sino prescribirla. La Cremación en la India es atestiguada en la Cultura de Cementerio H (1900 después de Cristo), considerada como la etapa formativa de la Civilización Védica, el Rig Veda contiene referencias de la emergente practica, en el Mandala 10 15.14 donde los antepasados "ambos cremados(agnidagdhá-) y no-cremados (ánagnidagdha-)" son invocados.

La Cremación fue común, pero no universal, en ambas Antigua Grecia y Antigua Roma. En Roma, la inhumación fue considerada el rito mas arcaico (Marco Tulio Cicerón, De Leg.,2.22), y verdaderamente el Gens Corneliano, uno de los más cultos en Roma, con la simple excepción de Sila, nunca permitieron la quema de sus muertos.

El Cristianismo reprobó la cremación influido por los principios del Judaísmo, y en un intento de abolir los rituales paganos Greco-Romanos. Por el siglo V, la practica de la cremación había desaparecido prácticamente de Europa.

En años posteriores

La cremación fue usada como parte del castigo a los herejes, y esto no solo incluía arder en la hoguera. por ejemplo, el cuerpo de John Wyclif fue exhumado -años después de su muerte- y cremado, y sus cenizas fueron esparcidas en un rio explícitamente como una forma de castigo póstumo por negar la doctrina de la Iglesia Católica de la Transubstanciación. La cremación retributiva (en base a las acciones en vida) continuo en los tiempos modernos. Por ejemplo, después de la Segunda Guerra Mundial, los cuerpos de 12 hombres convictos por los crímenes contra la humanidad en Los Juicios de Nuremberg, no fueron regresados a sus familiares, sino cremados, y depositados en una locación secreta, como parte especifica de un proceso legal encaminado a negar el uso de dicha locación como cualquier suerte de memorial.

En Japón, sin embargo, una construcción en memoria de los criminales de guerra ejecutados, quienes también fueron cremados, fue permitido erigirla para confinar sus restos.

La era moderna

El movimiento moderno de cremación comenzó en 1873, con la presentación de una Cámara de cremación hecha por el Profesor padovani, Brunetti en una exposición en Viena. En Gran Bretaña, el movimiento contó con el apoyo del Cirujano de La Reina Victoria, Sir Henry Thompson, quien junto con sus colegas fundaron La Sociedad de Cremación de Inglaterra en 1874. Los primeros crematorios en Europa fueron construidos en 1878 en Woking, Inglaterra y Gotha, Alemania, el primero en Norte América en 1874 por Julius LeMoyne en Washington Pennsylvania la segunda cremación en los Estados Unidos fue la de Charles F. Winslow verificada en Salt Lake City en Utah en julio de 1877. La primer cremación en gran Bretaña tuvo lugar el 26 de marzo de 1886 en Woking.

La cremación fue declarada legal en Inglaterra y Gales, cuando el doctor William Price fue procesado por cremar a su hijo, la legislación formal siguió después con la autorización del Acta de Cremación de 1902, (dicha Acta no tuvo extensión legal en Irlanda) lo cual supuso requerimientos procesales antes de que una cremación pudiese ocurrir y restringir su practica a lugares autorizados. Algunas Iglesias Protestantes comenzaron a aceptar la cremación, bajo la premisa racional del ser: "Dios puede resucitar de un tazón de cenizas tan convenientemente como puede resucitar de un tazón de polvo". La Enciclopedia Católica fue critica acerca de estos esfuerzos, refiriéndose a ellos como "movimiento siniestro" y asociándolo con la Francmasonería aunque se dijera que "no hay nada directamente opuesto a cualquier dogma de la Iglesia en la practica de la cremación". En 1963 el Papa Paulo VI levantó la prohibición de la cremación, y en 1966 permitió a los Sacerdotes Católicos la posibilidad de oficiar en ceremonias de cremación.

Procesos modernos de cremación

 

Horno crematorio

El lugar donde tiene lugar la cremación es llamado crematorium. El crematorio consiste de uno o más hornos y utillerías para el manejo de las cenizas. Un horno de cremación es un horno industrial capaz de alcanzar altas temperaturas de aproximadamente 870-980 °C con modificaciones especiales para asegurar la eficiente desintegración del cuerpo. Una de esas modificaciones consiste en dirigir las llamas al torso del cuerpo en donde reside la principal masa corporal.

El crematorio puede formar parte de una capilla o una agencia funeraria, o también puede ser de una construcción independiente o un servicio provisto por un cementerio.   Los hornos usan un número diverso de fuentes combustibles, tales como el gas natural o el propano. Los modernos hornos crematorios incluyen sistemas de control que monitorean las condiciones bajo las cuales la cremación tiene lugar. El operador puede efectuar los ajustes necesarios para proveer una combustión más eficiente así como de asegurarse de que la contaminación ambiental que ocurra sea mínima.

Un horno crematorio no está diseñado más que para quemar, un solo cuerpo a la vez, y no hacerlo es una práctica ilegal en muchos países.

La cámara donde el cuerpo es colocado es llamada retorta, y está construída con ladrillos refractarios que ayudan a retener el calor. Estos ladrillos requieren ser reemplazados cada 5 años debido a que la continua expansión y contracción causada por el ciclo de temperaturas suele fracturarlos.

Los modernos crematorios suelen ser controlados por un ordenador o computadora y están dotados de sistemas de seguridad y candados para que su uso sea legal y seguro. Por ejemplo, la puerta no puede abrirse hasta que el horno ha alcanzado su temperatura óptima, el ataúd se introduce en la retorta lo más rápido posible para evitar la pérdida de calor, a través de la parte superior de la puerta. El ataúd también puede ser introducido velozmente mediante una banda transportadora, o una rampa inclinada que puede permitir introducir inclinado el ataúd dentro del horno quemador.

En los crematorios se permite a los familiares ver la introducción del ataúd dentro del horno y a veces esto se hace por razones religiosas, ejemplo la cultura hindú, sin embargo, a pesar del respeto con el que el difunto es tratado, esto es fundamentalmente un proceso industrial, y no es recomendable para las personas sensibles o débiles de corazón.

Los crematorios tienen un tamaño estándar, un gran número de ciudades disponen de hornos de mayor dimensión capaces de manejar difuntos con una masa corporal de hasta 200 kg, sin embargo, personas con obesidad mórbida son preferentemente sepultados en lugar de ser destinados a la cámara crematoria.

Contenedor para el cuerpo

  Un cuerpo destinado a ser incinerado primero es colocado en un contenedor para cremación, el cual puede ser una caja de cartón corrugado o un ataúd de madera. La mayoría de los fabricantes de ataúdes proporcionan una línea de ellos destinada especialmente a la cremación. Otra opción es, una caja de cartón que queda dentro de un esqueleto de madera, diseñado para parecerse a un ataúd tradicional. Después del funeral, la caja interior es retirada del esqueleto, antes de la cremación, permitiendo la reutilización del esqueleto en otro funeral.

Alguna funerarias pueden ofrecer también alquiler de ataúdes, que son ataúdes tradicionales, usados sólo durante los servicios fúnebres, y después el cuerpo es transferido a otro contenedor destinado a la incineración. Los ataúdes en alquiler, suelen ser diseñados con camas y líneas movibles y reemplazables al final de cada uso.

En Australia, el difunto es incinerado dentro de un ataúd, suministrado por la funeraria. Los ataúdes reutilizables o de cartón son desconocidos. Si el costo es un asunto problemático, hay una línea de ataúdes de madera aglomerada conocido en el mercado como "económico" que se pone a disposición. Los asideros (si son solicitados) son de plástico aprobado para su uso en la incineración. Pueden ir desde madera aglomerada sin acabado o cubierto con tela de terciopelo (si es solicitado), hasta madera salida. La mayoría prefiere la madera aglomerada chapada.

Las cremaciones pueden ser servicio único sin ninguna ceremonia religiosa dentro de la capilla del crematorio (aunque hubiese habido alguno) ni precedido por algún otro. El servicio único permite planificar las cremaciones, para hacer un mejor uso de los hornos, debido al mantener el cuerpo durante la noche dentro de un refrigerador. Como resultado, los honorarios aplicables son más bajos. Servicio único es referido a menudo como "El servicio occidental de capilla".

Incineración y recolección de cenizas

  La caja conteniendo el cuerpo, es colocada en la retorta y es incinerada a la temperatura de 760 a 1150 °C. Durante el proceso, una gran parte del cuerpo (especialmente los órganos) y otros tejidos suaves son vaporizados y oxidados debido al calor y los gases son descargados en sistema de escape. El proceso completo toma al menos cerca de 2 horas.

Todo lo que queda después de que la cremación concluye son fragmentos secos de hueso (en su mayor parte fosfatos de calcio y minerales secundarios). Estos representan aproximadamente el 3.5 % del cuerpo original total. (2.5% en niños, aunque hay variaciones debidas a la consistencia del cuerpo). Debido a que el tamaño de los fragmentos de hueso secos están estrechamente conectados a la masa esquelética, su tamaño varia de persona a persona.

La joyería, tal como relojes de pulsera, anillos y pendientes, son ordinariamente removidos del cuerpo y devueltos a los familiares. El único articulo no natural que se requiere ser retirado previamente es el marcapasos, ya que éste podría estallar y dañar el horno. En el Reino Unido y seguramente en otros países es obligatorio para la funeraria el retirar el marcapasos antes de entregar el cuerpo al crematorio, y firmar una declaración que indique que cualquier marcapasos ha sido retirado. Después de que la incineración del cadáver ha concluido, los fragmentos de hueso son retirados de la retorta, y el operador utiliza un pulverizador, llamado "cremulador" en donde los procesa hasta que adquieren la consistencia de granos de arena (esto en función de la eficiencia del cremulador). Los pulverizadores generalmente hacen uso de alguna clase de mecanismo giratorio, para pulverizar los huesos, tales como los molinos de bolas en los modelos más viejos).

En Japón y Taiwán, los huesos no son pulverizados a menos de que los familiares lo soliciten previamente, y son recolectados por la familia.

Ésta es una de las razones por las cuales los restos incinerados son llamados "cenizas". Éstas son colocadas en un contenedor, que puede ser una sencilla caja de cartón o una urna extravagante. Una consecuencia inevitable de la cremación, es que un residuo diminuto de la persona se queda en la cámara después de la cremación y se combina con las cremaciones subsiguientes.

No todo lo que queda es hueso, algunas veces se extrae joyería perdida, ornatos del ataúd, amalgamas dentales, e injertos quirúrgicos como prótesis de cadera en titanio, los cuales a la inspección son retirados para evitar algún daño al pulverizador. Los pedacitos metálicos muy pequeños son retirados y enterrados en el suelo común y consagrados a un área alejada del cementerio.

La pira funeraria

  Un método alternativo usado en algunas culturas, como la hindú, es quemar el cuerpo en una pira que consiste en una pila de madera en donde se coloca ya sea encima o dentro el cuerpo de la persona. El apilamiento es encendido con fuego, el cual consume a la madera y al difunto. Este método no es común en el mundo occidental en donde el uso de hornos crematorios está extendido, y además está prohibido por la ley, en algunos países.

Maneras de conservar o disponer de las cenizas

  Las cenizas son devueltas dentro de un contenedor de plástico o cartón envueltas en un pequeño saco de terciopelo. Un certificado oficial de cremación acompaña a los restos.

Éstos pueden ser confinados en una urna, o espolvoreados en un sitio especial, una montaña, en el mar o sepultados en un camposanto. Adicionalmente hay servicios especiales los cuales se encargan de dispersar las cenizas en una variedad de formas y lugares. Algunos ejemplos son, el uso de un globo de helio, acompañado de fuegos pirotécnicos, disiparlas a través de escopetas especiales, o esparcirlas desde un avión. Algunos sugieren el envío de las cenizas al espacio interestelar, y otros el convertirlas en diamante, por un proceso para la fabricación de diamantes sintéticos (puesto que las cenizas consisten principalmente en carbono). También pueden mezclarse en una urna especial con cemento y formar parte de algún relieve artificial.

Las cenizas pueden ser dispersadas en parques nacionales (en Estados Unidos) a través de un permiso especial. También pueden esparcirse en una propiedad privada, previo consentimiento del dueño. Una porción del incinerado puede ser conservada dentro de un medallón especialmente diseñado para tal efecto, conocido como colgante de recuerdo. La disposición final depende de la voluntad final del difunto, así como sus creencias religiosas. Algunas religiones permiten que el incinerado sea esparcido o sea mantenido en casa. Algunas como la católica insisten en sepultar o enterrar los restos.

El hinduismo obliga al familiar masculino más cercano (hijo, esposo,padre) del difunto el sumergir las cenizas en el río sagrado del Ganges, preferentemente en la ciudad sagrada de Haridwar, India. Los restos cremados pueden también ser sepultados, en caso de que se tratara de una persona bien conocida.

En Japón y Taiwan, las cenizas y fragmentos de hueso, son entregados a la familia y se usan en un ritual funerario antes de ser sepultados.

Razones para elegir la cremación o incineración

  Algunas personas prefieren la incineración por razones personales al resultarles más atractiva que el entierro tradicional. A éstas les resulta muy desagradable la idea de un largo y lento proceso de descomposición, prefiriendo la alternativa de la incineración puesto que se destruyen los restos inmediatamente.

Otras personas ven la inhumación tradicional como una innecesaria complicación de su proceso funerario por lo que prefieren la sencillez de la cremación.

La cremación puede resultar más económica que los servicios de sepultura tradicionales, especialmente si se elige la cremación directa, en la cual el cuerpo es incinerado con la mayor brevedad según las disposiciones legales. No obstante, el coste total variará en función del servicio deseado por el finado y sus familiares. Por ejemplo, la cremación puede tener lugar después de un servicio funerario completo, o del tipo de contenedor elegido.

La cremación hace posible esparcir las cenizas sobre una área determinada, eliminando la costosa necesidad de ocupar un espacio dentro de un sepulcro o cripta. No obstante, algunas religiones como la Católica sugieren el sepulcro o tumba como destino final de las cenizas, lo que añade un costo. El uso de algunos tipos de nichos, llamados columbarios (palomares) se ha extendido debido a la economía en espacio y a su bajo precio, llegando a costar mucho menos que una cripta o mausoleo.

Costo y Beneficio Ambiental

Beneficio

Para algunos, la cremación es preferible por razones ambientales. La inhumación o sepultura es fuente de ciertos contaminantes ambientales. Las soluciones embalsamantes, pueden contaminar afluentes subterráneos de agua, con mercurio, arsénico y formaldehido. Los ataúdes por sí mismos también pueden contaminar. Otra fuente contaminante es la presencia de radioisótopos que se encuentren en el cadáver debido entre otras cosas a la radioterapia.

La creciente escasez de espacio para los cementerios es otro problema. En América, el ataúd es colocado dentro de una fosa de hormigón o concreto lo que disminuye el espacio convirtiéndose en un problema serio. Muchos cementerios, particularmente en Japón y Europa han comenzado a padecer la falta de espacio.

Costo

Por otro lado, investigaciones recientes indican sobre el daño potencial que ocasionan las emisiones de las cremaciones aunque comparativamente pequeñas en escala internacional, permanecen estadísticamente significantes. Entre otras emisiones, los contaminantes orgánicos persistentes, indican que la cremación contribuye con un 0.2% en la emisión global de dioxinas y furanos

Apreciaciones religiosas de la cremación

Religion dhármica

Mientras la religión abrahámica prohíbe la cremación y prefiere el entierro, las religiones del Este como el hinduismo y el budismo ordenan el uso de la cremación. En dichas religiones el cuerpo es visualizado como un instrumento portador del alma al nacer. Una de las citas del Bhagavad Gita señala: "Así como las vestimentas viejas son lanzadas lejos y se toman nuevas, el alma sale del cuerpo después de la muerte para tomar otro nuevo". De ahí que el cadáver no sea considerado sagrado, desde que el alma lo ha abandonado, así pues la cremación no es considerada como poco ética por la religiones orientales. En el sikhismo, el entierro no esta prohibido, aunque la cremación es la opción preferida por razones culturales más que por razones religiosas.

De acuerdo a las tradiciones hindúes, las razones para preferir la destrucción del cuerpo a través del fuego en lugar de sepultarlo es la de inducir un sentimiento de la separación del espíritu fresco e incorpóreo, a quien sera útil alentar en su paso a "el otro mundo" (el último destino del muerto). Esto explica también los entierros de santos varones (cuyo espíritu ya ha sido "separado" suficientemente debido a practicas ascéticas de toda la vida) y de niños y jóvenes (cuyos espíritus no han vivido casi para desarrollar lazos con este mundo).

Los santos varones son sepultados en la posición de flor de loto y no en posición horizontal como en otras religiones. La cremación es referida como antimsamskara significando literalmente "la ultima condición"

Cristianismo

En los países cristianos, la cremación perdió aceptación entre las personas. El desaliento de la Iglesia Católica hacia la cremación provino de varias ideas: primero, que el cuerpo es como un instrumento a través del cual se reciben los sacramentos, es por sí mismo sacramental, y debe ser considerado como objeto sacro; segundo, como parte esencial del ser humano, se debe disponer de él de una manera honrosa, y reverencial, y muchas prácticas tempranas eran visualizadas como paganas y como un insulto al cuerpo; tercero, como una imitación de la inhumación de Jesucristo, el cuerpo de un cristiano debía ser sepultado, y cuarto que constituía una negación de la resurrección del cuerpo. La cremación no estaba prohibida porque interfiriese definitivamente con la capacidad de Dios de resucitar el cuerpo, sin embargo, esto fue refutado inicialmente por Minicius Felix, en su diálogo Octavius

La cremación no fue de facto prohibida en sí y por sí misma, aun en Europa dentro de la etapa Medieval fue practicada bajo situaciones en la cuales había multitudes de cuerpos simultáneamente, tales como en una batalla , durante una "peste" o alguna hambruna, y en donde existiese un peligro latente de focos de esparcimiento de enfermedades a través de los cadáveres.

Sin embargo, la inhumación o sepultura quedaron a ley salvo en casos en que las circunstancias requirieran la cremación para bien público.

A principios de la edad media y aun tiempo después, pasado el siglo XVIII, racionalistas y clasicistas comenzaron a señalar a la cremación nuevamente, como una negación de la resurrección y/o la vida después de la muerte, aunque el movimiento en pro de la cremación muy frecuentemente no tomase mucha atención en discernir sobre los asuntos teológicos acerca de la misma.

El sentimiento intrínseco de la Iglesia Católica contra la cremación vino a endurecerse al afrontar la asociación de ésta con las reglas de los "enemigos profesos de Dios", lo cual vino a suavizarse hacia los años 60. La Iglesia Católica sigue prefiriendo la inhumación tradicional o el sepultamiento del cuerpo, pero la cremación ahora es libremente permitida, en tanto no signifique un rechazo a la creencia en la resurrección del cuerpo.

Hasta 1997, las regulaciones litúrgicas católicas, requerían que la cremación tuviese lugar después de la ceremonia funeraria religiosa, de ser posible de cuerpo presente, el cual debería recibir la bendición y ser sujeto de oración, mencionando al difunto. Una vez que ésta hubiese concluido, el cuerpo podría ser cremado y un segundo servicio religioso podía asistirse en el crematorio o en el momento de enterrar las cenizas como si se tratase del cuerpo en sí. Las regulaciones litúrgicas actuales permiten una misa con el contenedor de cenizas presente, pero se necesita autorización previa del obispo local si es necesario. La Iglesia mantiene los requerimientos específicos para la disposición reverente de las cenizas, normalmente éstas son sepultadas o enterradas en un contenedor apropiado, tal como una urna (en lugar de mantenerlas en la casa de los familiares, aun cuando en algunos hogares católicos suele ser práctica usual).Los cementerios católicos hoy en día reciben restos cremados, los cuales son confinados en nichos especiales.

La Iglesia Protestante fue más concordante con el uso de la cremación y mucho antes que la Iglesia Católica; el sentimiento de pro-cremación no fue del todo unánime entre los protestantes, no obstante, el primer crematorio en los países protestantes se construyó en 1870, y en 1908 el decano y capitán de la abadía de Westminster, una de las más famosas Iglesias Anglicanas solicitó que los restos que fueran incinerados debían ser sepultados en cercanía de la abadía. El dispersar las cenizas o regarlas es una practica aceptable en muchas denominaciones protestantes, y algunas iglesias tienen su propio "jardín del recuerdo", sitio en el cual, los restos pueden ser dispersados. Otro grupo cristiano que también apoya a la cremación son los Testigos de Jehová.

Por otra parte, algunas ramas de la cristiandad se mantienen en oposición a la cremación, incluyendo algunas minorías protestantes. Más notable es la prohibición que mantiene la Iglesia Cristiana Ortodoxa. Bajo excepciones que son consideradas inevitables (cuando las autoridades civiles o situaciones de posibles epidemias lo requieren). Cuando la cremación es elegida voluntariamente, para una causa no buena para quien muere, a él o ella no se le permite un funeral en la iglesia, y puede ser excluido en las oraciones litúrgicas para los desaparecidos. En la religión ortodoxa, la cremación es considerada un rechazo general al concepto de resurrección, y como tal es visto severamente.

Judaísmo

El judaísmo ha desaprobado tradicionalmente a la cremación (que fue uno de los medios tradicionales para disponer de los muertos en la Edad del Bronce vecina a las culturas Semíticas Paganas). De la misma forma también ha desaprobado la conservación del muerto por medio del embalsamarlo y la momificación.-Una practica de los egipcios antiguos-. Durante el siglo 19 y 20 tempranos, como los cementerios judíos, en muchas ciudades europeas habían llegado a su limite poblacional, la cremación fue aceptada como un medio de entierro entre los judíos Liberales.Los movimientos liberales actuales, como La Reforma al Judaísmo, siguen apoyando a la cremación, aunque la inhumación permanece como la opción preferida.

Los judíos Ortodoxos, han mantenido, una estricta línea respecto de la cremación, la desaprueban tal y como en el Halakha (Ley Judía) se prohíbe. Este referente halakhi refuerza la resurrección de la persona como una creencia central del judaismo "convencional", en comparación con otras tendencias antiguas tales como el Saduceo,que lo niega. También la memoria del Holocausto, donde millones de judíos fueron asesinados, y sus cuerpos fueron dispuestos quemándolos en hornos crematorios, o en fosas ardientes, le ha dado a la cremación connotaciones muy negativas para el Judaísmo Ortodoxo de los grupos conservadores.

Religión Mormona

Desde su organización en 1830, la Iglesia de los Santos de los últimos Días, a través de sus líderes ha exhortado a sus seguidores a evitarla, a menos que sea requerido por la ley, y hasta donde sea posible, para consignar al cuerpo al entierro en la tierra, y a permitir a la naturaleza el encargarse de su disolución, "del polvo has sido creado, y en polvo te convertirás" (Gen 3:19). El presidente Spencer W. Kimball escribió: "El significado de la muerte no ha cambiado, libera un espíritu para el crecimiento y desarrollo, y coloca un cuerpo en la madre tierra". Con el tiempo los regresos mortales del cuerpo al elemento nativo, y si se guarda en un sitio elegido por la familia para el entierro, o se inhuma en las profundidades del mar, cada parte esencial, se restaurará en la Resurrección: "Cada miembro y su coyuntura serán restaurados a su cuerpo; aun un pelo de la cabeza no se perderá, todas las cosas regresaran a su marco apropiado y perfecto.

Zoroastrismo

Generalmente el Parsis prohíbe totalmente la cremación como como algo que ensucia al fuego, símbolo de todo lo que es sagrado, el entierro es desconocido también, por razones semejantes, y para el método tradicional para disponer de un cadáver es el exponer los cuerpos a los buitres, en "Torres de Silencio". Sin embargo algunas figuras contemporáneas de la fe, han optado por la cremación. El cantante líder de la banda musical Queen, Freddie Mercury, quien fue un creyente Parsi-Zoroastrano, fue quemado después de su muerte. En adición, Rajiv Gandhi fue objeto de una gran publicidad a partir de la cremación de su cuerpo en una pira de madera de Sandalo, el también fue Parsi (aunque Hindu por vía materna)

Neopaganismo

Acorde a las interpretaciones feministas de los registros arqueológico, la cremación es un rasgo característico de las religiones Patriarcales, el humo elevándose simboliza el espíritu del difunto ascendiendo al dominio de las deidades Padres en los cielos. Mientras que en las religiones Matriarcales, se especula que favorecen el enterramiento del cuerpo en posición fetal para representar el regreso del cuerpo a la Madre Tierra a través de la tumba que simboliza el Utero. De las religiones Neo-Paganas modernas, La Asatrù, está a favor de la cremación.

Otras religiones que permiten la cremación

Ásatrú, Buddismo, Cristianismo (contemplando a la Iglesia de Irlanda, Iglesia de Gales, Iglesia Unida de Canadá, Luteranismo, Metodismo, Iglesia Moravia, Ejercito de Salvación, Iglesia Episcopal Escocesa), Ciencia Cristiana, Iglesia de Cienciología, Hare Krishna (Asociación Internacional para la Conciencia de Krishna ), Hinduismo ( exceptuada para sanyasis, eunucos y niños menores de 5 años), Jainism, Seventh-day Adventist Church, Sikhs, Sociedad de Amigos (Quakers), y Universalismo Unitario, todas permiten la cremación.

Otras religiones que prohíben la cremación

El Islam y el Zoroastrismo la prohíben contundentemente. El Neo-Confusionismo bajo Zhu Xi firmemente desaprueba la cremación de un familiar como un acto no filial.

Experiencias Históricas Negativas recientes con la cremación

Segunda Guerra Mundial

Durante el Holocausto, crematorios masivos fueron construidos y operados por los Nazis dentro de los Campos de Concentración y Campos de Exterminio, para deshacerse de los cuerpos de miles de judíos, Gitanos, y otros prisioneros, quienes fueron asesinados o muertos en los campos diariamente. En adición a la atrocidad de este Asesinato masivo, los restos de judíos fueron tratados de una manera profundamente ofensiva, al Judaísmo Ortodoxo, porque Halakha, la ley judía, prohíbe la cremación, en vista a que el alma de una persona incinerada no puede encontrar descanso final. Desde entonces la cremación conlleva un sentido muy negativo para muchos judíos. Una actitud semejante y predominante en algunos países que fueron ocupados por los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial, tal como, Polonia y parte de Rusia. En parte también, debido al papel de la cremación en el holocausto nazi, los principales criminales de Guerra, en los Juicios de Nuremberg, quienes fueron incinerados y dispersos en localidades secretas. Algo que no sucedió con los militares japoneses que fueron incinerados.

El incidente de Tri-State

Un suceso polémico reciente, fue el escenificado en el Crematorio de Tri-State localizado en el estado de Georgia, a principio del año 2002, en donde 334 cadáveres que supuestamente habían sido cremados, en años anteriores, fueron encontrados intactos, y descomponiéndose en el piso del crematorio, apilados ahí por el propietario del crematorio. La identificación de los cadáveres fue "más allá", en muchos casos las "cenizas" que fueron devueltas a los familiares, no eran humanos, ya que en realidad estas eran polvo de concreto y madera. Finalmente, Ray Brent Marsh -quien fue el operador en el tiempo en que los cuerpos fueron descubiertos- tenia 787 cargos criminales en contra de el.El 19 de noviembre de 2004 resulto culpable de todos los cargos. Fue sentenciado a dos condenas de 12 años en prisión por ambos estados, Georgia y Tennessee en donde sirve corrientemente. Estara bajo libertad condicional durante 75 años.

Enlaces externos

  • www.crematorio.eu Crematorio en Europa

Referencias

 
Este articulo se basa en el articulo Cremación publicado en la enciclopedia libre de Wikipedia. El contenido está disponible bajo los términos de la Licencia de GNU Free Documentation License. Véase también en Wikipedia para obtener una lista de autores.
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